Presento
oficialmente mi renuncia al trono de mi reino muy muy Cercano.
En verdad
, mi sueño nunca fue el de ser reina , pues amo la vida sencilla y vivida por
méritos propios.
Al heredar
la corona del país muy muy lejano , mi primera orden fue cambiar dicho nombre
por reino “muy muy cercano”.
Esta renuncia,
ha sido consecuencia de mi pueblo y en nombre de mi pueblo.
Un día
, mientras paseaba sin rumbo por los grandes y hermosos jardines de mi gran
palacio , de lejos vi a uno de mis sirvientes que volvía del pueblo con un
acompañante .
Me sorprendió
ver la manera con la que trataba a aquella jóven , como si fuese una mercancía barata
. Inmdiatamente me acerque y pregunté a la joven si se sentía respetada.
Levantó la vista lentamente , me miró solo por un instante y la bajo rápidamente
sin contestarme. Le dije: “joven , este es el reino muy muy cercano , acércate
a mí , no te haré daño”.
La joven
, se acercó despacio y temerosa y dijo sigilosamente “majestad mis hijos están
solos desde hace horas , son muy pequeños , por favor permíteme regresar con
ellos. Así lo hizo.
“¿Cómo
puedo recompensarle majestad?”.
“Cuidando
a tus hijos y acercándote a los demás como , en nombre de nuestro pueblo”.
En ese
momento , comprendí , que mi propio pueblo me tenía miedo y si realmente quería
que mi reino fuera el reino muy muy cercano , debía acercarme yo. Me vestí
rápidamente con ropajes de un aldeano y me acerqué al poblado , dejando atrás
mi corona y mi dinero.
En aquellas
calles , había una pobreza increíble . No entendía como no me podía haber dado
cuenta antes. Oía a mi gente hablar de mi como la reina que había liberado a
esa joven del guarda de palacio . pero necesitaba algo más y mi reino también .
Seguí andando por las calles y a medida que avanzaba veía de manera más evidente
la gran necesidad de que alguien ocupara el trono y lo hiciera mejor que yo . Por
eso , me juré a mí misma encontrar a esa persona .
Un día
, mientras paseaba por los mercadillos del poblado , vi como un hombre mayor
gritaba a un joven que le pagara inmediatamente sus deudas.
Al cabo
de un tiempo , nos volvimos a cruzar. Fue entonces cuando me presenté como una
aldeana más , y a pesar de saber que tenía graves problemas económicos , le
pedí dinero .
El joven
, me miró a los ojos y metió su mano en sus amplios bolsillos , dándome todo lo
que tenía .
Fue el
acto más bello que habían hecho por mí , a pesar de tener a cientos se
sirvientes en palacio a mi disposición . Sin conocerme me abrió su corazón .
Sin tener ni una peseta me dio su dinero y lo más importante , me ayudó sin saber
quien era , no fue porque yo fuera su reina , sino pura bondad .
Por eso
, escribo este informe en el que expongo lo que ocurrió para que yo tomara esta
decisión de mi renuncia al trono.
Espero que lo hagas, sí :)
ResponderEliminarUn placer, guapa.
Anotado.